Esto es lo que ha comprobado una serie de investigaciones recientes, que revelan que una buena hidratación es fundamental para que los niños tengan un buen aprendizaje e incrementen su rendimiento escolar.
El tema se tratará mañana en el Primer Simposio de Hidratación organizado por la Sociedad Chilena de Pediatría (Sochipe) y la U. del Desarrollo (UDD). Allí se analizarán también las necesidades de hidratación en las embarazadas y el adulto mayor.
Pruebas de destreza
Si bien el tema se viene estudiando desde hace tiempo, “el estudio más reciente se hizo en Israel, donde al llegar los niños al colegio se les medía la densidad de la orina, para luego someterlos a pruebas cognitivas y comparar a los que llegaron bien hidratados y los que estaban algo deshidratados. A estos últimos se les reducía el aprendizaje y la memoria, entre otros factores”, explica el doctor Francisco Moraga, pediatra, nutriólogo y past president de la Sochipe. Su consejo a los padres es que “manden a los niños al colegio con una botella de agua, y que las bebidas sean de consumo ocasional”.
En cuanto al embarazo, la directora de la Escuela de Nutrición de la UDD, Rinat Ratner, dice que en el primer trimestre se deben sumar 500 cc a la ingesta de agua. Y en el segundo y tercero se llega a beber tres litros. “Esto previene las infecciones urinarias, los cálculos renales y el estreñimiento”, dice.
Respecto al adulto mayor, el doctor Marcelo Blacutt, geriatra de Clínica Alemana, advierte que con la edad hay una atrofia en el hipotálamo, que reduce la sensación de sed. “Por eso están siempre en el límite de la hidratación, y basta un día de calor para que se deshidraten”, dice. Recomienda jugos, helados, sopas y jaleas para esta edad.
