No es una pregunta sorprendente, es una muy común, y no importa si se hace a los médicos, dietistas, amigos o incluso a Google, las respuestas pueden parecer como si hubieras estado escuchando cientos de conversaciones a la vez. Con la gran cantidad de información disponible en el Internet y en los medios de comunicación, puede resultar desalentador discernir los hechos de la ficción. A continuación, discutimos las preguntas más comunes sobre los beneficios de los lácteos a la salud y el bienestar, para que dispongas de los datos necesarios para tomar tu propia decisión. (¡Además, pensamos que la leche es muy buena para ti!)
Ésta es una pregunta muy frecuente y un concepto erróneo. Las investigaciones demuestran que los lácteos no son inflamatorios y que, además, pueden ser antinflamatorios. La mayoría de la gente no suele reconocer cuán compleja es la inflamación, ni los tipos de inflamación (aguda o crónica). Además, algunos de los síntomas de la intolerancia a la lactosa pueden confundirse con la inflamación.
Personas de todo el mundo llevan miles de años consumiendo alimentos fermentados. El proceso natural de fermentación afecta a la matriz física y nutricional de la leche para crear queso o yogur. Estos cambios que se producen en los alimentos fermentados afectan a la digestión, la absorción y el metabolismo, que probablemente desempeñan un papel en la inflamación. Toda esta ciencia quiere decir que una de las mejores formas de ayudar a combatir la inflamación crónica es mediante una dieta nutritiva que incluya una variedad de alimentos integrales, incluyendo los lácteos.
Las bebidas a base de plantas pueden encajar en una dieta sana, pero no son nutricionalmente equivalentes a la leche de vaca.
Según las Guías Alimentarias de EE.UU., sólo las bebidas de soja enriquecidas se consideran alternativas lácteas adecuadas. Comparada con las bebidas alternativas, la leche de vaca suele ser una mejor fuente de proteínas de alta calidad y 13 nutrientes esenciales, con una lista de ingredientes sencilla y un precio asequible. Las bebidas alternativas varían en perfiles nutricionales, aditivos y azúcares añadidos.
Es por eso que las organizaciones expertas advierten contra las bebidas a base de plantas para los niños en crecimiento, y en su lugar recomiendan leche y agua.
Sí, la leche y los productos lácteos son importantes para un crecimiento sano, el desarrollo y la formación de huesos fuertes. Pero ¿sabías que el consumo de lácteos también está relacionado con la salud del corazón, la digestión y la función inmunitaria, así como con el desarrollo temprano del cerebro y el control del peso? Intenta consumir tres porciones de lácteos al día, junto con frutas, verduras, proteínas magras y cereales integrales.
¿Quieres algo de inspiración? Prueba bebidas fermentadas como el kéfir, o prepara esta nutritiva receta que incluye yogur griego: colorida receta de tazón de acai, o sirve esta exquisita receta para un divertido desayuno de fin de semana.
Ya sea que tengas 5 o 55 años, los lácteos pueden ayudarte en tu camino hacia la salud.
La mayoría de los estadounidenses no cumplen las recomendaciones de calcio, vitamina D y potasio, tres de los cuatro nutrientes subconsumidos que preocupan a la salud pública (el cuarto es la fibra). Los productos lácteos aportan más de la mitad del calcio y la vitamina D de la dieta estadounidense y son las fuentes más rentables de esas vitaminas y minerales.
Sustituir los nutrientes de los productos lácteos por alimentos no lácteos requeriría un aumento de la ingesta total de alimentos, del costo y de las calorías (frente a las tres raciones recomendadas de productos lácteos). No te detengas ahí: consume alimentos variados -incluyendo lácteos, frutas, verduras, cereales integrales y otras proteínas magras- para conseguir la dieta más rentable y rica en nutrientes.
La leche con sabor a chocolate es una fuente importante de nutrientes para muchos niños en edad de crecimiento. Esta ofrece una fuente excelente de 13 nutrientes esenciales y sólo aporta un 4% de azúcares añadidos a la dieta de los niños. Según este estudio, el consumo de leche con sabores no está asociado al sobrepeso ni a la obesidad, y a menudo se relaciona con una calidad general más sana de la dieta. A los niños les encanta el sabor y, por tanto, es más probable que la beban, lo que redunda en beneficios nutricionales y reduce el desperdicio de alimentos.
Por supuesto, la leche con sabores, como la de chocolate, no es sólo para los niños. Tómate una ración de 8 onzas después de hacer ejercicios para obtener lo que tu cuerpo necesita para ayudar a la recuperación de tus músculos.
Las Guías Alimentarias para los Estadounidenses recomiendan los productos lácteos bajos en grasa o sin grasa para las personas a partir de 2 años. Pero las directrices no excluyen las grasas saturadas; el límite está fijado en el 10% de las calorías totales diarias. Es posible incluir una porción de lácteos enteros como parte de una dieta sana en general.
Las nuevas investigaciones demuestran que consumir lácteos enteros no sólo puede encajar en un plan de alimentación sana, sino que puede ayudar a reducir el riesgo de cardiopatías, diabetes de tipo 2, mortalidad, infartos, hipertensión arterial y obesidad. Sus efectos protectores se deben probablemente a los beneficios del perfil nutritivo único de los lácteos.
¡Gracias a nuestros amigos de Leche De Florida por compartir esta información con nosotros!
